La primera mitad de la década de los noventa estuvo marcada por la sorpresa, la incertidumbre y numerosos acontecimientos sucesivos que impactaron a Cuba y al mundo, pero lo que vendría después no sería menos intenso. En la segunda mitad, la escasez se hizo más profunda y las tensiones —dentro y fuera del país— parecían no concedernos descanso. En mi memoria siguen vivos esos momentos: las tragedias que nos sacudieron, los cambios que nos sorprendieron y las señales de que la historia de Cuba continuaba escribiéndose en medio de la incertidumbre.
El año 1996 abrió otra etapa cargada de tensiones y
sucesos que aún resuenan en mi memoria y que me confirmaron que todavía
quedaban pruebas muy duras por enfrentar.
Aquel año comenzó con un hecho sumamente dramático: el
24 de febrero ocurrió el derribo de dos avionetas Cessna de la organización
benéfica estadounidense “Hermanos al Rescate”, integrada por cubanos exiliados
en Miami. Esta agrupación había surgido durante la llamada “Crisis de los
Balseros”, con la misión de auxiliar a quienes se lanzaban al mar en frágiles
embarcaciones rumbo a Estados Unidos. En aquel ataque perdieron la vida cuatro
pilotos y el incidente estremeció al mundo.
Poco después, el 12 de marzo, otro golpe llegaría
desde Washington: el presidente Bill Clinton firmaba la polémica Ley
Helms-Burton, que endureció aún más el embargo contra Cuba y buscaba
internacionalizarlo. Apenas unos días más tarde, el 21 de marzo, en Cuba se
prohibieron las antenas parabólicas, una clara muestra de la intención del
régimen de cortar una ventana de los hogares cubanos hacia el mundo exterior.
El 9 de mayo, los llamados acuerdos secretos
Tarnoff-Alarcón establecieron que los balseros cubanos recogidos en alta mar
serían devueltos a Cuba, cerrando así el ciclo abierto con la “Crisis de los
balseros” a inicios de la década.
En el plano diplomático, el 19 de noviembre, el líder
de la Revolución realizó una histórica visita al Papa Juan Pablo II en el
Vaticano, gesto que anticipaba nuevos puentes de diálogo entre Cuba y la
Iglesia.
Pero aquel año no solo estuvo marcado por sucesos
nacionales. El mundo también fue testigo de un acontecimiento que parecía
ciencia ficción: el 5 de julio nacía Dolly, la primera oveja clonada a partir
de una célula adulta. El anuncio generó asombro, esperanzas y también temores
por lo que significaba manipular el ADN, abriendo un debate que aún hoy no ha
perdido vigencia.
Así, 1996 fue un año en el que en Cuba continuaron las tensiones y prohibiciones, pero en el que también se dieron gestos diplomáticos y se produjeron descubrimientos que parecían adelantados al futuro.
1997 fue otro año que comenzó marcado por la
violencia: el 12 de abril se produjeron atentados con bombas contra hoteles y
otras instalaciones en Cuba, aparentemente perpetrados por individuos
procedentes de El Salvador. Estos hechos dieron inicio a una serie de atentados
en hoteles y lugares similares que se prolongaron hasta septiembre de ese año.
Entre las víctimas de estos siniestros se encontraba el turista italiano Fabio
di Celmo, quien falleció a causa de la explosión de una bomba en el lobby del
hotel Copacabana el 4 de septiembre. Estos acontecimientos de gran
trascendencia en el país aumentaron la incertidumbre y la inestabilidad
internas.
En el plano cultural de la isla, el 27 de abril
falleció en La Habana la ilustre poetisa Dulce María Loynaz del Castillo, una
de las voces más refinadas y reconocidas de la literatura cubana del siglo XX,
dejando un vacío irreparable en la cultura nacional.
En el terreno político, el 27 de junio se publicó y
difundió en Cuba “La Patria es de todos”, un documento redactado por el llamado
“Grupo de los Cuatro” sobre democracia, fraternidad y el futuro de Cuba. Pocos
días después, sus autores fueron detenidos y acusados de sedición, evidenciando
la tensión entre voces disidentes y el régimen.
El 8 de diciembre falleció otro político destacado:
Carlos Rafael Rodríguez, uno de los principales dirigentes cubanos y fundador
del Partido Socialista Popular, dejando una trayectoria política y económica de
profundo impacto en la Revolución.
El 25 de diciembre se vivió un hecho histórico en la
vida cotidiana de los cubanos: por primera vez después del triunfo de la
Revolución, se permitió celebrar la Navidad como fiesta religiosa y de asueto.
A nivel internacional, el 31 de agosto el mundo
recibió con conmoción la noticia de la muerte de la princesa Diana de Gales en
un accidente vehicular en París, que dio pie a rumores y especulaciones sobre
posibles complots. Años después, un juez francés concluyó que la tragedia fue
provocada por el conductor, Henri Paul, quien, tras consumir alcohol y
antidepresivos, perdió el control del vehículo al intentar evadir a los
paparazzi.
Por otra parte, 1997 también fue un año de
espectáculos que marcaron la cultura popular mundial. Se estrenó “Titanic”, la
película protagonizada por Leonardo DiCaprio y Kate Winslet, que se convirtió
en un fenómeno global y fue galardonada con 11 premios Óscar.
De este modo, 1997 se perfiló como un año de marcados
contrastes: entre tensiones internas, lamentables pérdidas y atentados
terroristas, se integraban otros hechos de notable significación cultural,
tanto nacionales como internacionales, que captaban el interés mundial.
Con la visita histórica a Cuba del Papa Juan Pablo II,
del 21 al 25 de enero, comenzó el año 1998. El Sumo Pontífice recorrió la isla,
presidiendo misas en La Habana, Santa Clara, Camagüey y Santiago de Cuba.
Durante su estancia, realizó un acto nocturno en el Aula Magna ante los restos
del Padre Varela y visitó el santuario de San Lázaro en El Rincón. Su mensaje
fue claro y constante: la palabra “libertad” apareció 53 veces en sus
discursos, dejando una profunda huella en la sociedad cubana.
El 16 de julio se reanudaron los vuelos entre La
Habana y Miami, después de dos años de interrupción, marcando un pequeño alivio
en las relaciones y el intercambio entre ambos países. Sin embargo, las
tensiones diplomáticas continuaron: el 24 de diciembre, Estados Unidos expulsó
a tres diplomáticos cubanos en Nueva York, reflejando la persistencia de los
roces políticos.
En Estados Unidos, 1998 también estuvo marcado por un
escándalo político: se filtraron detalles íntimos de la relación entre el
presidente Bill Clinton y la becaria Monica Lewinsky. La noticia y la
investigación posterior condujeron al juicio político por perjurio contra
Clinton en la Cámara de Representantes; finalmente, el Senado lo exoneró de
todos los cargos tras un juicio de 21 días.
En el ámbito cultural, el 26 de junio, la escritora
J.K. Rowling lanzó el primer libro de su aclamado universo de magia: Harry
Potter and the Sorcerer’s Stone, iniciando un fenómeno mundial que capturaría
la imaginación de millones de lectores.
Y en ciencia y medicina, tras haber sido patentado en
1996, el medicamento Sildenafil (Viagra) fue aprobado por la FDA para tratar la
disfunción eréctil, marcando un hito en la salud masculina y generando un
amplio debate social y mediático.
El año 1998 se perfiló entonces como un año de
disímiles acontecimientos: visitas históricas, avances médicos, fenómenos
culturales, tensiones diplomáticas y escándalos internacionales, todos dejando
una huella imborrable en la memoria colectiva.
En Cuba, el juicio y condena de los miembros del
"Grupo de los Cuatro" en marzo de 1999 fue un hecho de gran
trascendencia al inicio del año, evidenciando la continua represión del régimen
contra la disidencia.
En noviembre, el caso de Elián González acaparó
titulares internacionales. El niño de cinco años fue rescatado en aguas
floridanas tras un naufragio en el que su madre perdió la vida. Su padre, en
Cuba, reclamó su custodia, mientras que familiares en Miami se oponían. Después
de cinco meses de intensas negociaciones y manifestaciones en ambos países,
agentes federales realizaron un operativo en la casa de los familiares en Miami
y devolvieron al niño a su padre en Cuba, generando una gran repercusión mediática
y política. Este hecho fue aprovechado por el máximo líder de la Revolución
para iniciar una amplia campaña política, conocida como la “Batalla de Ideas”,
durante la cual se realizaron numerosas concentraciones y manifestaciones
populares, con el objetivo de mostrar al mundo el respaldo ciudadano hacia el
Gobierno.
A nivel internacional, el 1 de enero, el euro se convirtió en la moneda oficial de 11 países europeos, marcando un hito en la integración económica del continente y uniendo bajo una misma divisa a millones de ciudadanos.
Ese año también estuvo marcado por tragedias que
impactaron profundamente al mundo. El 20 de abril, en Estados Unidos, dos
estudiantes abrieron fuego en la escuela secundaria de Columbine, Colorado,
matando a 12 compañeros y a un maestro antes de suicidarse. Este suceso
conmocionó a la sociedad estadounidense y generó un intenso debate sobre el
control de armas y la seguridad en los colegios.
El año 1999 se destacó por eventos que marcaron el
cierre de una década y del milenio, reflejando tensiones políticas, avances
tecnológicos y movimientos sociales que resonaron en todo el mundo.